Amanecer en el cuartel de bomberos después de una guardia tranquila es una buena experiencia. Sin accidentes trágicos. Conservando el cuerpo, la mente y las emociones sanas. Respirando aire limpio. Amanecer sin una capa de humo en el ambiente que recuerde el incendio sofocado en la madrugada, sin el olor a sudor, a maletines de trauma ó a aceite hidráulico, usado en un accidente vehícular. Sin los recuerdos grabados en la mente, como fotografías o pedasos de vídeos, del sufrimiento de las victimas de alguna emergencia.
Hermosillo, Sonora
Hermosillo, Sonora
COMO CITA LA BIBLIA, SOMOS MUCHOS LOS LLAMADOS
ResponderEliminarPERO POCOS LOS ELEGIDOS, DIOS TE BENDIGA MI NIÑO
A TI Y TODOS TUS COMPAÑEROS POR TAN NOBLE LABOR
AETR